Descubrí tener una deuda kármica cuando me acerqué a los Registros Akáshicos. Te cuento mi historia para que puedas entender qué es un deuda kármica y aprender a sanarla.
¿Qué es una deuda kármica?
La deuda kármica es una deuda pendiente que viene de vidas pasadas y se manifiesta negativamente en nuestro presente. Normalmente, es consecuencia de las decisiones que tomamos y, de esto modo, la persona se enfrenta a vivir ciertas situaciones para que pueda limpiar su Karma y aprender lo que antes no pudo.
Para entenderlo mejor, una deuda kármica se manifiesta como problemas que somos incapaces de resolver, por ejemplo, una lucha constante con el dinero que nos puede llevar a juicio o sabotear ciertas relaciones, resultando problemáticas o conflictivas. Aunque cada caso es distinto y no podemos generalizar, podemos decir que si descubres que luchas constantemente con problemas o patrones repetitivos, éste es una clara señal de que tienes una deuda kármica.
El haber hecho algo malo en el pasado, aún sin saberlo, nos hace sentir culpable y tratamos de espiar esta culpa con un castigo.
A nivel emocional, una deuda kármica acarrea un gran sentimiento de culpa. Es como si, de algún modo, la persona percibiera que hizo algo malo o terrible en el pasado, se siente culpable y, por esto, ahora merece sufrir un castigo y el mejor castigo, en este caso, es su infelicidad. Pero, ¿Cómo romper o eliminar una deuda kármica entonces? Hablaremos de ello enseguida, pero antes quiero contarte mi historia para que tengas un claro ejemplo.
Cómo descubrí mi deuda kármica?
Perdí a mi mamá hace 22 años en un accidente. Enseguida conecté con la culpa y me sentía como si hubiera podido hacer algo más y no lo hice. Así fue como me acerqué a los Registros Akáshicos, tratando de darle un sentido a algo que para mí no lo tenía.
Descubrí que hubo varias vidas que nos unieron. Y, en particular, quería saber si hubo más accidentes en el pasado para entender de donde me venía esta extraña sensación.
Los Registros me revelaron que hubo una vida anterior en la que ella me salvó la vida: yo estaba caminando por la calle e iba a ser atropellada por un coche de caballos y ella corrió para quitarme del camino pero no pudo salvarse.
Allí fue donde se generó un deuda kármica, fomentada por la creencia de no haber hecho lo suficiente en esta vida actual para salvarla. Lo curioso y lo más importante es que esta deuda kármica realmente ya estaba saldada! Sí porque también hubo una vida anterior en la que yo la salvé, pudiendo equilibrar la balanza: era una vida en la que éramos amigas; ella se fue al agua y no lograba volver a la orilla. Yo me lancé para rescatarla pero no logré salir.
Como puedes ver, no hay deuda, no hay karma o accidente que limpiar. La deuda quedó saldada. Sólo quedaba romper esta creencia para sanar la idea de que faltaran accidentes por vivir desde el sistema kármico.
¿Cómo limpiar o sanar una deuda kármica?
Normalmente la deuda finaliza cuando el Alma aprende la lección. Pero existen casos, como el mío, en que la deuda ya expiró pero la persona sigue sintiendo que debe algo y sigue pagando por ello. Es como si fuéramos a pedir al banco un préstamo y llegado el momento de extinguirlo, seguimos yendo al banco a pagar. De locos pero es así!
Por esto es tan importante rescatar la vida anterior en que se originó esta deuda, trabajar sobre la culpa que nos mantiene en el castigo y traer el aprendizaje necesario para poder liberarnos y sanar.
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2 comentarios en «MI DEUDA KÁRMICA, CÓMO APRENDÍ A SANARLA»
Precisamente había conectado con varias señoras encargadas del tarot, una me decía que muy pronto iba a tener un cambio en mi vida, había tenido una infancia feliz, la recordada de vez en cuando, pero tenía obstáculos en la economía y trabajos donde buscaba empleo, pues he notado esas ataduras o karmicas, que lucho me esfuerzo nada cambia, a punta de oraciones logro para medio comer, pero en el fondo siendo algo que no permite avanzar en mi profesión como en el dinero. me han hablado de la deuda karmica, como hacer el ritual fuego karmico, a veces pongo en duda lo que me están diciendo, me toca averiguar conceptos que le estoy exponiendo, como logro salir adelante.
Espero su ayuda, soy persona mayor de 68 años, deseo de todo corazón salir adelante, pero la situación de Colombia puede ser una de ellas, y en mi interior lucho y siento opacar mi vida-.
Buenas tardes Carlos, para disolver una deuda kármica hay que hacer una labora algo más profunda que empieza desde el conocimiento y el entendimiento de lo que pasó y acaba con un drecreto de disolución de pactos o deudas kármicas. Hay varios factores en juego y, desde mi experiencia, no es sólo hacer un ritual de fuego. Contáctame y con gusto te ayudare, un abrazo