CUENCO TIBETANO, EL SONIDO DEL BUDISMO

Puede que estés planteándote comprar uno o es posible que tengas en tu casa un cuenco y no le hayas sabido sacar todo su potencial. En ese caso, te invito a descubrirlo conmigo con este artículo donde encontrarás:

• Qué son los Cuencos Tibetanos
• Su historia
• Tipos de cuencos
• Cómo tocarlos
• La terapia del sonido y sus beneficios.

El cuenco tibetano, también llamado tazón cantador o tazón tibetano, es un instrumento musical de metal utilizado como una herramienta de sanación profunda y de desarrollo espiritual. Su sonido y vibración estimulan el cuerpo para recrear su propia frecuencia armónica favoreciendo la relajación profunda. Los cuencos cantores proporcionan una gran sensación de paz a la vez que favorecen la limpieza de bloqueos emocionales y de la energía negativa en el ambiente. Se trata de una poderosa herramienta de relajación que ejerce una gran influencia en cuerpo y mente, generando sensación de paz y bienestar, gracias a las vibraciones que emite.

HISTORIA DE LOS CUENCOS TIBETANOS

Cuentan los historiadores que el origen de los cuencos tibetanos se remonta en la India a 2.400 años atrás, en la época de Siddhartha Gautama y fueron introducidos en Tibet algo más tarde. Venían utilizados por los monjes tibetanos para meditar y relajar el cuerpo y la mente. Posteriormente se propagaron por toda Asia, alcanzando países del lejano oriente como China, Japón, y Corea, gracias a la ruta de la seda. Lamentablemente poco sabemos sobre su origen ya que la invasión de China hizo que se perdiera mucha información.

Fue gracias al movimiento hippie de los años 60, cuando estos preciados objetos llegaron a occidente. Hoy en día, los cuencos tibetanos se han extendido en todo el mundo y vienen utilizados en varias terapias alternativas como el Reiki, mindfulness, yoga, sonoterapia, musicoterapia y meditación.

Eso sí, los antiguos cuencos tibetanos eran totalmente artesanales, mientras que, hoy en día, pocos preservan esta característica que los hacía únicos. Además, ya no se fabrican en Tibet, sino principalmente en la India y en Nepal. En estos lugares aún se puede encontrar la antigua técnica de fabricación, que ha sido preservada de generación en generación. Sin embargo, en occidente, no siempre llegan cuencos artesanales y además su precio suele ser mucho más elevado que donde se fabrica.

TIPOS DE CUENCOS SONOROS

Existen diferentes formas de fabricar un cuenco sonoro, dependiendo del tipo de material que se utilice y del método de fabricación.

La calidad del sonido depende de estas dos características y de otras como el peso y el tamaño del cuenco e incluso del el estado emotivo físico y psíquico de quien lo toca.

Por regla general, existen dos tipos de cuencos sonoros: los cuencos de metal y los de cuarzo. Veamos estas dos tipologías antes de ver como hacerlo sonar.

CUENCOS DE CUARZO

Los cuencos de metal están compuestos por una aleación de metales, cuyo número varía entre cinco, siete e incluso nueve metales. Estos instrumentos pueden tener un tamaño entre los 10 cm. de diámetro y un metro aunque los más usados oscilan entre los 20 y 30 cm. Los de siete metales, por sus características, tienen un mayor valor y un mejor sonido que perdura en el tiempo respeto a los de cinco metales.

Es importante destacar que el número siete no es un número elegido al azar, ya que éste se considera un número especial: siete son los chakras que existen en nuestro cuerpo y también las notas musicales. Cada uno de los metales que componen el cuenco está asociado, siguiendo la astrología tibetana, a un cuerpo celeste. Así, el plomo es Saturno, el oro es el Sol, la plata es la Luna, el cobre es Venus, el hierro es Marte, el mercurio es Mercurio y el estaño es Júpiter.

CUENCO DE CUARZO

Este tipo de cuenco está fabricado íntegramente por este mineral. Su calidad sonora es inigualable tanto por su calidez como por su armonía, por lo que su precio es más elevado respecto a los anteriores.

Si le ponemos agua y lo hacemos sonar, la vibración se expande aún mejor potenciando su efecto de sanación y armonía. Tener cuencos tibetanos de cuarzo en casa, es un auténtico lujo por su calidad de sonido, su magia al vibrar y su beneficiosa energía.

CÓMO TOCAR LOS CUENCOS

El cuenco tibetano se toca a través de un mazo o baqueta de madera cuyo tamaño va en proporción a lo grande que es el cuenco. Las baquetas suelen ser de madera y, en muchos casos, recubiertas de cuero o piel en una extremidad.

Existen distintas técnicas para tocar los cuencos como golpear, frotar, añadiendo agua o usando cantos vocales o mantra. En este contexto, trataremos principalmente las técnicas de golpear y frotar.

Aprender a tocar correctamente un cuenco tibetano lleva algún tiempo y requiere mucha práctica. Tocarlo puede parecer algo muy simple aunque en realidad es todo un arte.

Si quieres saber cómo tocar un cuenco tibetano, sigue leyendo o bien mira mi vídeo en Youtube que te explicará de forma práctica y fácil cómo hacerlo.

CÓMO SUJETAR EL INSTRUMENTO

Hay que tener en cuenta algunos puntos antes de empezar a tocar un cuenco tibetano:

– El cuenco tiene que apoyar sobre las punta de los dedos o bien sobre la palma de la mano abierta. Si el cuenco es muy grande entonces se apoyará en el suelo o un cojín para cuencos tibetanos.

– La baqueta se sujeta por la parte de madera como si fuera un lápiz, con el dorso de la mano apuntando hacia arriba y las puntas de los dedos hacia abajo.

LA FORMA CORRECTA DE HACER SONAR EL CUENCO TIBETANO

Podemos tocar nuestro cuenco tibetano utilizando estas dos técnicas:

1. El golpeo o percusión que se obtiene golpeando o bateando la pared exterior del cuenco con suavidad y delicadeza. De este modo, el cuenco emitirá un profundo y relajante sonido, que irá desapareciendo poco a poco.
2. Con giros o fricción en el borde: se trata de utilizar la baqueta sobre el borde del cuenco trazado círculos, manteniendo la presión de manera uniforme en todo momento.

Para su uso correcto, la baqueta tendrá que estar inclinada unos 30 grados. De esta manera el sonido será continuado, transportándonos a un estado de concentración y meditación. Una vez el cuenco empiece a vibrar, relájate, mantén un ritmo constante y disfruta de ese estado de calma.

LA TERAPIA DEL SONIDO Y SUS BENEFICIOS

El propósito de estos instrumentos es el de emitir unas ondas sonoras que contengan la esencia del mantra Om, el sonido primordial de la creación. Por la ley de resonancia, las ondas del cuenco penetran en nuestro cuerpo y de forma natural transforman nuestra vibración.

El sonido y la vibración de los cuencos cantores proporcionan una gran sensación de paz y bienestar. El efecto producido en nuestro cuerpo es de disolución de los bloqueos y de elevación de la frecuencia. Se trata de una poderosa herramienta de relajación que ejerce una gran influencia en cuerpo y mente.

BENEFICIOS

Los cuencos tibetanos, gracias a su sonido, tienen un efecto curativo y proporcionan importantes beneficios como:

• equilibran los dos hemisferios del cerebro.
• armonizan la energía del cuerpo y equilibran los chakras.
• disuelven los bloqueos emocionales.
• limpian el lugar de malas vibraciones y energías negativas.
• reducen el estrés y las tensiones.
• relajan la mente.
• proporcionan sensación de bienestar.
• ayudan a meditar.
• impulsan el crecimiento espiritual.

CONCLUSIONES

Una vez más la sabiduría ancestral nos enseña a no olvidar lo útil y eficaz que es acoger dentro de nosotros el simple sonido de un cuenco que nos ayuda a alcanzar la armonía en su estado más puro, elevado, espiritual.

Ahora ya conoces los cuencos tibetanos y sus beneficios, espero que lo disfrutes!