Hoy quiero hablarte de como las relaciones de pareja son grandes maestras y entender el porque las personas con la que estás o este novio que has tenido, han podido enseñarte mucho. Puede que sea tu alma gemela o puede que no. Hablaremos de todas estas casuísticas. Y sobre todo aprenderemos que es lo que nos vienen a enseñar.
¿Qué tipo de pareja elegimos?
Nuestras parejas, las que hemos tenido, puede que no siempre sean la relación que esperábamos. A menudo, se trata de relaciones tóxicas, conflictivas o incluso destructivas que nos hacen cuestionar el porque hemos acabado en esta relación. Y la respuesta es sencilla aunque verlo lleva su tiempo.
Todas, absolutamente todas venían a enseñarnos algo. Y recuerda que esto forma parte de unos vínculos que se buscan desde planos superiores, es decir, antes de nacer.
Po lo tanto, a la hora de elegir una pareja desde un punto de vista espiritual, tenemos que entender a la pareja bien como:
- alguien que nos complementa, que nos ayuda a mejorar y que, quizás, nos empuja a perseguir nuestro propósito.
- una pareja conflictiva o que hace de espejo en aquello que no quieres o no eres capaz de ver en ti.
Toda pareja viene a mostrarnos una parte nuestra escondida en la sombra.
Pareja espejo
En nuestra sociedad, estamos tan acostumbrados a mirar hacia afuera y a centrar la atención en lo que el otro hace o dice que no somos capaces de mirar en nuestro interior. Si lo hiciéramos, entenderíamos que si algo de esta persona me está molestando es porque está despertando algo mío no sanado. Ten en cuenta, que siempre que hay una molestia, una situación de estrés o que no me deja indiferente es porque está resonando con mi historia.
¿Qué ocurre entonces a nivel pareja? Que lo que yo no estoy viendo en mi, lo estoy proyectando en el otro/a.
Te pondré un ejemplo aunque es sólo uno de muchos. Por ejemplo, puedo decir que mi marido es muy pesimista, controlador o dramático en cuanto a eventos se trate. Sin darme cuenta de que, al escogerle y al ver esto en él y molestarme, es porque hay una parte mía que reniega que yo también soy controladora o pesimista o dramática.
Así que las parejas que hemos tenido han sido para nosotros maestras porque nos han enseñado algo. Porque gracias a ellas hemos crecido, madurado y ahora tenemos claro que tipo de relación queremos y cual no.
Si algo de mi pareja me molesta, es porque me está despertando algo mío no sanado.
Claro está que, dependiendo del tiempo que compartamos juntos, puede que una misma pareja nos ayude a cumplir muchos aprendizajes o puede que estos se cumplan con varias.. Y cuando este se cumple es probable que la pareja termine. Como puede ocurrir que tu decidas seguir con ella porque sabes que con ella vas a seguir aprendiendo mucho.
Alma gemela
Con el Alma gemela ocurre algo distinto. ¿Por qué? Porque, de alguna manera, las Almas gemelas se buscan y se reconocen. De hecho, puede que se busquen vidas tras vidas o incluso pactan todo esto antes de encarnar, en un espacio entre vidas. Así que ocurre algo muy curioso con el Alma gemela: la persona que está con su Alma gemela no necesita que le confirmen que lo es porque internamente ya sabe que es así.
¿Realmente elegimos a nuestra pareja?
No siempre es así. Puede que las personas con las que hayas compartido una vida en pareja sean escogidas por ti. O puede que hayan sido elegidas por tus guías, por ser maestros y poder ayudarte a llevar a cabo un aprendizaje determinado.
Recuerda siempre que el objetivo en pareja es aprender. Así que hayas tenido la pareja que hayas tenido, todo fue perfecto porque te ayudó a crecer y ser la personas que eres hoy en día.
¿Qué opinas de todo esto? Te leo.
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