Finalmente llegamos a la quinta y última etapa del duelo: la aceptación, la única etapa que no es reversible. Veamos por qué.
En las fases anteriores del duelo (negación, rabia, negociación y depresión), hemos visto como el duelo no es un camino que se recorre en línea recta.
Y por ello, a veces ocurre que volvamos atrás en una etapa que ya creíamos superada. En cambio, cuando finalmente llegamos a aceptar de verdad, ya no podemos volver atrás, a estas etapas anteriores. Así que si estás en esta etapa, mi ENHORABUENA!
Aceptar significa reconocer que aquello que pasó es realidad, que estás dispuesta a aceptarlo y esto no significa que ya no te duela si no que el dolor ya no controla tu vida.
No se trata de olvidar ni tampoco de resignarse. Al resignarnos lo único que hacemos es limitarnos a sobrevivir. En cambio, aceptar es llevar contigo esta persona, soltando el dolor y quedándote con su recuerdo.
Simplemente se trata de encontrar una oportunidad para salir adelante. De entender que esta persona perdió su vida y que tu no puedes desperdiciar la tuya. Por esto, es tan importante hacer una elaboración adecuada del duelo.
"En el momento en que aceptas la pérdida es cuando puedes volver a la vida."
Finalmente puedes entender que la vida sigue adelante aunque esta persona ya no esté. Esto no significa que deje de dolerte, significa dejar de pelearte con la realidad y con el dolor. Significa hacer un balance de tu vida y readaptándote al nuevo entorno que se te presenta ahora.
En esta fase, se producen cambios importantes como el dejar de idealizar a la persona amada. Además soltamos muchas emociones dañinas como la culpa y la rabia. Y volvemos a retomar la vida con nuevas etapas y oportunidades.
Como resultado sueltas el dolor, quedándote únicamente con el recuerdo de esta persona. Y buscas una nueva actitud frente a la vida, aunque no sea lo que hayas pedido.
Esto no quiere decir que sea una etapa de felicidad y alegría pero es ahora cuando la esperanza aflora y comprendes que la vida te ha dado una segunda oportunidad.
Ahora puedes hacer un balance de tu vida, encontrar la paz y aprender a vivir en el nuevo contexto que se te presenta. Y esto proporciona un crecimiento personal y emocional sumamente importante.
El OBJETIVO es reconstruir una vida estable con proyectos que te ilusionen. Por esto, es tan importante que se cumplan las cinco fases del duelo: negación, rabia, negociación, depresión y aceptación.
Aceptar es SOLTAR todo este dolor y todas estas emociones que tienes dentro. No las reprimas porque sólo así podrás salir adelante y volver a disfrutar de la vida, porque la VIDA ES UN REGALO y TÚ ESTÁS EN LA VIDA. SÉ FELIZ. 
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